Media Maraton de León

Mi primera media maratón llegaba con mucho respeto pero sin presión ninguna, el objetivo era acabarla llegaba con molestias musculares y sin entrenar mucho, aun así mis aspiraciones fueron muy altas y me marque aguantar el ritmo al máquina de Abel.

Gabriel García Vázquez

Llego el domingo y madrugue bastante por miedo a aparcar muy lejos, así que llegue con tiempo al bar y me hice con un par de mesas para cuando llegase la artillería del Club Atletismo León, ya mientras esperaba se notaba que el ambiente no era el mismo que se vive normalmente en una popular o trail normal, acentos diferentes muchos grupos grandes y caras desconocidas, empezó a llegar el presi , Omar, Hugo y aun faltaban otros máquinas. Fuimos a cambiarnos por que llegaba la hora de calentar y al volver ya teníamos a todas las bestias listas, Samuel, Gonzalo, Aller y Juan Carlos.


Empezó la carrera y Samuel se nos fue a 3:40 ayudando a un amigo como el que se va al supermercado a por la compra, sin pestañear….. Omar muy fuerte y con sus objetivos de bajar del 1:20 se fue desde el principio, mientras yo cerca de Abel para mantener ese tiempo que iba clavando km tras km, a Gonzalo  se le vio algo los primeros km pero pronto encendió  esa locomotora y fue adelantando puestos sin parar, al paso por los diez seguíamos a la perfección nuestros tiempos y yo me iba encontrando bien y sin molestias .
Abel y Gabri

 
En cada rincón de león nos iban animando diferentes componentes del club, familiares y amigos como Fran, Manu Mediavilla, el presi y muchos más que no hacían más que subirte la moral y hacerte olvidar del paso de los km. El animal de Abel seguía marcando a la perfección  los km y a falta de 5 km decidimos subir un poco el ritmo para acabar bajando el crono asta  1:21 Abel y yo , 1:20 Gonzalo y Omar , Samuel entro en 1:18 porque había pasado una mala semana de gripe  y aun  así menudo crack, Juan Carlos entro cerca de nosotros y a Aller  le perdí la pista pero lo haría como siempre, muy bien.


 
Mi resumen de la media y primera experiencia es que puede ser una bonita distancia para ir mejorando el tiempo poco a poco, hay que controlar tu cuerpo para no pasarte ya que es una distancia que si te pasas es fácil que termines perdiendo 10 minutos de tu objetivo y que con gente como los del club Atletismo León todo parece fácil y no lo es. Que en todas las carreras hay gente muy preparada y cada podio o liga ganada conlleva muchísimo trabajo e ilusión que no se ve detrás .Hip arriba como dice el Gran Moja


 Gabriel García Vázquez


VIAJE A ECUADOR PARTE 2



ACLIMATÁNDOME

Salgo del aeropuerto con la Chompita rumbo a casa, donde instalare el cuartel general, el campo base, el punto de partida para todas las aventuras que están por venir. Este pequeño trayecto de 30 minutos es un continuo asombro, todo me parece nuevo, un paisaje extremadamente abrupto con continuos y fuertes ascensos y descensos, un tráfico, un tanto, digamos que alocado. Mientras tanto la Chompi y yo nos ponemos al día de nuestras vidas.

     Una vez instalado nos fuimos a hacer unas pequeñas compras a un centro comercial, donde vi, como en todo centro comercial, un zara, un pull&bear, y toda la recua de tiendas de inditex, no me sorprendió, era obvio que el más rico de España llegará antes que yo a Ecuador. Finalmente acabe en una tienda de Movistar para comprar una tarjeta de móvil, con tanta empresa española llegue a pensar que estaba aún en Madrid, pero no, era Quito y era verdad, aquí to y yo. Que malo el juego de palabras pero no me lo aguantaba.
Después de las compras una visita fugaz a la zona del centro del mundo y a la entrada al volcán de Pululagua, para ir organizando las jornadas venideras.
Ya en casa y tras cenar, empiezo a organizar y plasmar sobre el papel aquello a visitar y  los planes que quiero hacer. Preso del cansancio a las 10 de la noche de Ecuador estaba ya mirando para adentro.
Jorge Sabugo


     Mi primer amanecer en Ecuador, a las 5:30 en pie y pronto aparecen los primeros rayos. Un buen desayuno y antes de las 7 estaba saliendo a entrenar. Ya con las ideas claras de dónde ir, ya planeado con anterioridad, cojo carretera abajo durante 4 km, la mayoría de personas con las que me cruzo giran la cabeza, supongo que pensaran, este muy perdido esta, pero yo sigo a lo mío. Llego a la pasarela metálica q me servía de referencia para girar a la izquierda y meterme en el monte, para comenzar a subir, y vamos q si subí, 800m de desnivel positivo en apenas 4 km, conseguía ponerme por primera vez en mi vida por encima de los 3000 m sobre el nivel del mar, y manteniendo los pies en el suelo. Para bajar tomaría una pista un poco más tendía pero con un empedrado que me trituraba los tobillos, rápido salí otra vez a la carretera general que me llevaría de vuelta. Primer día en Quito a las 9 de la mañana con un calor infernal y yo ya había cumplido. 2 horas de carrera, 17 km, y 900 m de desnivel positivo.
Tenía idea de ir a Otavalo a conocer la localidad  y cultura dado que es la zona del país donde mejor conservan las tradiciones, pero finalmente un cambio de planes me lleva a visitar el lago  Quilotoa, que era una de mis preferencias de este viaje. 
Lago Quilotoa

     El trayecto no sería corto, unas 3 horas de carretera, por las que fui empapándome de la cultura ecuatoriana. Me sorprende que en cualquier semáforo o peaje multitud de gente te ofrece fruta, zumos y variedad de productos caseros, también me sorprende que en cualquier rincón hay alguien cocinando en medio de la calle y vendiendo esa comida. De camino al lago hacemos una parada para ver el cañón de un río, y comer un choclo con queso, aprovecho para hacerme una foto con una llama. Proseguimos el viaje por una carretera que parece no tener fin, no paramos de subir y subir, hasta por fin llegar. Estaba a 4000 m de altitud, para asomarme al cráter de un volcán y ver atónito ese precioso lago. No tuve más remedio que emprender la bajada hasta la orilla, perdiendo unos 500m de desnivel bajando por un sesteadero arenoso, en el que me cruzaba no sólo con mucha gente sino también con los caballos de alquiler para subir. Tras contemplar el paisaje, emprendí el regreso, que se haría más duro de lo que pensaba, lo tome con calma, aunque empecé a darme cuenta que la altitud empezaba a afectar. 

Una vez fuera del cráter, compro algunos recuerdos y emprendo el regreso.
La jornada no se extendería más, cena y a dormir.
Madrugo la mañana del sábado, mi destino, volcán de Pululahua, apagado hace muchos años, dicen que es único en el mundo ya que su cráter está habitado. Cojo un autobús, toda una experiencia aquí, pasan cada 5 min, las paradas casi no llegan a ser paradas, subes y bajas en marcha, el conductor, conduce, su ayudante cobra y anuncia por la ventana al acercarse las paradas, pronto se llena y fácilmente llegara al centenar de personas, es difícil moverse allí dentro. Mi parada era la última y ya medio vacío el bus bajo con calma. Emprendo una subida de unos 2 km por asfalto que me lleva a la entrada al volcán, tras pasar el registro de visitantes me asombro de las vistas desde él mirados y comienzo a bajar hacia el cráter, la idea era solo caminar, pero la bajada tan pronunciada y el terreno malo hacen que eche a correr y saque mis dotes de cabra, ya en el llano del cráter, tras perder en pocos minutos más de 500m de desnivel, comienzo a trotar suave, regalándole a mis ojos y mi mente la belleza de la reserva botánica del Pululahua, que cuenta con más de 250 especies de orquídeas de las cuales 80 solo se dan aquí adentro. Sigo por una pista que me lleva a un gran cañón por el que discurre un río, o al menos lo intuyo por el sonido del agua, ya que la gran profundidad de este y la densa vegetación no me dejan ver. Cuando me quiero dar cuenta llevaba 15 km, y desde el mirador había perdido más de 1200m de altitud. Entonces decidí volver sobre mis pasos.  

     El calor empezaba a apretar, la sudoración era importante, administre mi agua, hasta llegar a la hacienda escondida que para mi sorpresa se encontraba cerrada. Proseguí de vuelta al llano del cráter donde acabe en la terraza de la rinconada de Rolando Vera, atleta ecuatoriano que participó en 3 olimpiadas, entre ellas en Barcelona 92 en la modalidad de maratón, su victoria en el maratón de los Ángeles del 95 es una de muchas. Allí me pido una jarra de casi dos litros de limonada, me recreo con las vistas, y rápido emprendo la subida hacia el mirador. Tras una dura subida salgo del volcán, de nuevo me encuentro a 3000m. 
Trofeos de Rolando Vera

Antes de volver a casa visitó el templo del sol, donde escuchó un poco de historia ecuatoriana, y de cómo tras la invasión española, Pizarro secuestra al rey Atahualpa y pide un rescate en forma de oro, que se llegó a realizar, y hoy en día está considerado como el rescate más caro de la historia por el libro Guinness de los récords con un valor cercano a los 2 billones de dólares. Los españoles tras recibir el oro ejecutaron al rey Atahualpa.
Escuchaba rodeado de casi una treintena de ecuatorianos, y sentí verdadera vergüenza, no pude más que agachar la cabeza, y contener una pequeña lagrima que se me escapaba, supongo que eran otros tiempos, otras culturas y otras guerras, pero todo eso me dio que pensar.
Pensar en cómo España fue invadida por los musulmanes, y luego nosotros, después de un secular salto, pasar de invadidos a invasores, también me dio por pensar en que esa codicia por el oro quizás sigues viva en nuestros días en forma de corrupción, robos, estafas, etc. 

Pronto me anime ya que un niño se acercó a mí y me pregunto si era español, hable un rato con él, tendría unos 11 o 12 años y decía que quería vivir en España. Tras tomar un té de coca en la última parte de la visita del templo, ya cuando abandonaba el lugar se acercó El Niño para despedirse chocándome la mano y luego el puño.
Rápido llegue a la parada de bus, llegada a casa. Algo de cena, un poco de charla con la familia Orbe y pronto a cama.
Estaba cansado, habían caído más de 30 km y más de 1500 m de desnivel positivo y otro tanto negativo. 


Jorge Sabugo Sousa


VIAJE A ECUADOR (1ª PARTE)



 PORQUE, CUANDO Y COMO 

Para explicar este viaje debo remontarme al otoño de 2013, y como toda buena historia empezaré por el principio.

Vivía en Pontevedra, la boa  Vila, bonita tierra, buena gente y buen comer. Por aquel entonces mis inquietudes deportivas estaban en plena efervescencia, tenía las sensaciones encontradas, de diferentes emociones como completar un iroman, o acabar un ultra Trail de nivel mundial como es la transgrancanaria. Empezaba a decantarme por dedicarme solo a correr, a correr mucho y muy lejos, el triatlón no me acabo de enganchar, soy mal nadador, hay que aceptarlo, y los entremos de bici de carretera me aterrorizaban, iba en constante tensión por el tráfico, en cambio, correr, correr por el monte, sufrir subiendo y bajar cual cabuxa gallega me hacían sentirme libre y feliz. 

Llevaba un tiempo bajo la dirección de un entrenador el gran jason stathan, perdón quería decir Anxo Graña, me va a decir alguien que no los confundiría.
 Anxo entrenaba a un pequeño grupo de triatletas, que pese a que yo renegare de su disciplina me acogieron como uno más de la familia, sería el seno de lo que después sería la gran familia de deportistas GV SPORTS.

Sabugo y Anxo Graña (Jason Stathan)
 Este grupo de triatletas crecía poco a poco, un día llegada del otro lado del charco, apareció Daniela o como cariñosamente le llamamos La Chompita (fui yo quien la bautizó pero eso es otra historia que quizás cuente en otro momento).

La Chompita es una tía alegre, risueña, soñadora, con un don especial para crear, inventar y plasmarlo en un papel, se podría decir en forma de dibujo, pero creo que es una palabra vulgar para lo que ella hace, yo diría que es puro arte. 

La Chompi llego a Pontevedra para formarse y completar sus estudios, su amor a la bici le llevó hasta Anxo y de ahí a la pequeña familia de deportistas.
Pronto fue una más del grupo, acabo cayendo en la triple disciplina, y los entremos en grupo siempre eran risas con ella. Es de esas personas alegres que pase lo que pase parece vivir en el país de la gominola, siempre con sus ideas y sus dibujos a cuestas. 

Con el tiempo su visado acabo y tras el verano de 2014 regreso a Ecuador, siempre decía que teníamos que ir a verla, y a mí me decía que me enamoraría de las montañas ecuatorianas. 

Ahí quedó la cosa y casi un año después Daniela vuelve para pasar los tres meses que esta vez le permite su visado. Yo estaba esperando con ansia mi traslado a León y solo coincidimos un mes en Pontevedra, Daniela me cuenta en primera persona como últimamente se ha aficionado también a las carreras de montaña.  Me habla de los picos ecuatorianos y de su experiencia de hacer cima en el cotopaxi, palabras mayores. 
Entonces se me encendió la bombillita, tenía que ir a Ecuador, tenía que hacer alguna de esas cimas. 
El pasado otoño y con Daniela en Ecuador comencé a organizar mi viaje, y en un par de semanas estaba todo planeado. 
Solo quedaba esperar. 

Faltaba menos de una semana para el viaje y la maleta medió hecha, van zapas y ropa de correr, lo demás da igual, eeeeeh no te calientes que vas un mes me dije, mete calzoncillos, más calzoncillos, 30 calzoncillos más, saca 25 que allí también hay lavadoras, y entre tanto mete saca (ropa de la maleta mal pensados),despedida por aquí despedida por allá (alguna tan emotiva que alguno debe pensar que me voy a quedar en Ecuador) llegó la boda de Javi & Ángela, unos días justo antes de irme, y lo que allí vi, viví, no tiene palabras, todo muy muy , todo muy muy, pues todo muy perfecto, son quienes son, no podía ser de otra manera. 

Comenzando el viaje (Estación de Buses de León)
 Pronto me planté en martes por la mañana, el jefe supremo de los Sabugo me lleva a la estación de autobús y se despidió con un seco "ten cuidado", ahí fue cuando me di cuenta que en nada estaría de vuelta.
Tras cambiar los billetes de bus para adelantar el viaje llego a Barajas poco después del medio día donde me recibe un paisano leonés que voló del reino para arreglar aviones allí donde haga falta. 

Un poco de Bolos
Matamos el tiempo jugando a los bolos, contando historias, rompiendo pantalones, no sé si fue el ansía de viajar, el ímpetu con la que lanzaba en la bolera, o quizás, y más probable, la nueva moda de pantalones antimovimiento, tan ceñidos que al forzar mi técnica más depurada de jugador de bolos abrieron por la entrepierna como una lata de pringles, vamos que hicieron pop ya no hubo stop.  No había empezado el viaje y ya tenía una baja en el equipaje. Por un momento pensamos en hacer un funeral de estado, pero pronto vi un contenedor y ahí acabó la historia. 
Poco después se unió al grupo el caballero toledano, y tres paisanos del reino juntos tienen mucho peligro. 

Una tarde de risas, entre historia e historia, broma a broma me planté en la ventanilla de facturación, y, sorpresa, " caballero su vuelo no saldrá hasta mañana por cuestiones de mantenimiento"  cara de polla ( puedo decir polla aquí, no?) mirada de los mil metros y la azafata me dice, tranquilo le alojaremos en un hotel a gastos pagos de manutención y transporte. En poco tiempo estaba alojado en un hotel de 5 estrellas y para matar un poco el tiempo me fui a tomar una birra y jugar un billar con el toledano.

Vuelo Madrid-Lima
Al día siguiente madrugue para salir a rodar un poco y completar con media hora de elíptica y un circuito de fuerza en el gimnasio del hotel. Un buen desayuno y camino al aeropuerto, tras facturar nueva sorpresa, el retraso supondría perder la conexión Lima Quito y tendría que pasar la noche en Lima. Facturó, pasó el control, y cuando me quiero dar cuenta estoy sentado en el avión, esperaban 13 horas de vuelo. Intento ver una película y ya cae  las dos primeras horas, por la película no preguntéis, obviamente quien me conoce sabe que me dormí, el rey del sueño no decepciona. Pronto aparecen las bandejas de comida, y tras alimentar a la bestia intento leer un poco. Cuando me quiero dar cuenta miro el reloj y veo que quedan 4 horas para llegar, mire el mapa de vuelo y veo que acabábamos de sobre volar Canarias, no me salen las cuentas, entonces ya me doy cuenta, quítale 6 horas al reloj, y pon la hora de Ecuador, sorpresa, te quedan 10 horas de avión. 
Entre peli y peli, o mejor dicho entre intento e intento de peli, entre siesta y siesta, una voz dice soy el capitán ....
Y empezamos a descender sobre el aeropuerto de Lima. 

Rápido busco el mostrador de la compañía aérea, que ya sabedores de mi percance, único del vuelo con conexión a Quito, me tienen preparado un taxi para que me alojen en el hotel Serathon, una impresionante torre en el centro de la ciudad que destaca entre los múltiples edificios bajos. 

Desde mi hotel en Lima

Me reciben con trato exquisito y con la cocina cerrada me preparan algo para cenar, y pronto a dormir, ya era la 1 de la mañana aquí, pero en España eran las 7.

Mi cuerpo asimila bien el cambio horario y a las 6 de la mañana ya estoy en pie, quería aprovechar mi estancia fugaz y tras una hora de elíptica en el gimnasio bajo a correr unos 20 minutos al parque de al lado del hotel para darle al entreno un poco de transferencia a la carrera. Tras la ducha preparo la mochila y bajó a desayunar, ese típico desayuno de buffet libre de hotel, y como buen español que soy me pongo, ay madre como me pongo, tostadas por aquí, un poco de tofu por allá, un plato de arroz, esto otro no se q es pero también me lo como, esto está bueno repito, eso sí evitó todos los dulces, que no decaiga la operación trikini, y culminó con un buen platao de fruta.

Entre andando y rodando consigo llegar a la recepción del hotel, donde con un retraso de casi media hora llega el taxista a recogerme, eso sí yo como soy previsor y no quería jugármela le había pedido que viniera una hora antes de la que realmente necesitaba, Asique aún tenía medio hora más, a mayores del colchón previamente calculado, estaba en modo asfixia vale, quería veros yo aquí.

Me presento en el aeropuerto, pasó los controles correspondientes y busco mi puerta de embarque, me relajo a la espera, y comienzo a transcribir parte de esta crónica  hecha hasta ahora en modo clásico, papel y boli. 

Una vez sentado en el avión el capitán Fernando Torres y su copiloto Roonie (apellido ni me entere) nos da la bienvenida, y digo, pero que hay cruce de champions atlético de Madrid Manchester o es que están en segunda actividad tras su abandono del fútbol. Bromas aparte, sobrevuelo Lima y su Costa rumbo a Quito. Vuelvo a rellenar por segunda vez los papeles de aduanas, esta vez sí, los de Ecuador. Sorprendido por las montañas andinas me pasó el vuelo mirando por la ventana hasta que llegó a Quito.

Pasó rápido todos los controles, la verdad que me lo esperaba todo más caótico, pero me sorprende la buena organización y la seriedad de todo el personal. Todo resulta fácil y ágil. Me plantó en medio del pasillo a la espera de que la Chompita llegue a buscarme, y en pocos minutos entra por la puerta.
Quito me espera 
Por fin con la Chompita

PD: como ya me conozco lo que van a pensar muchos, este no es un viaje de amor ni sexo ni nada por el estilo. No tergiversen mis palabras ni se hagan pajas mentales. 
Daniela es una gran amiga, y si, aunque algunos no lo crean yo sí creo entre la amistad y nada más que amistad entre hombres y mujeres, sin que haya intenciones sexuales de por medio. 

Jorge Sabugo Sousa

Carrera de Alto Sil



Llego el momento y tras una semana dura de esquí, unos problemillas de estómago y el nacional de esquí de travesía llega el momento. Suena el despertador y de un salto salgo de la cama, me visto y a desayunar (Un plátano, un vaso de zumo, unas almendras y un tazón de leche).
Llegó a Santa Cruz recojo el dorsal y me preparó escuchando algo de música. Saludo a Deibi, Vero, Botillos Team etc. Comienzo a calentar con mi compi de Tombrío durante 15 min. Cojo sitio en la salida al lado de la élite y veo a mi compi Javi Pascual y tras saludos y demás estamos listos. 10-9-8-7-6-5-4-3-2-1 FUEGO.
Ángel González Rivero
Comenzamos a ritmo alegre y muy bien de piernas y tras un ratin corriendo el primer embudo, una cuestina estrecha donde subimos sin pegas y llegan las pistas y por fin el cortafuegos en V que tanto me gusta. Comienzo a adelantar gente y “Dios como me gusta bajar”, Subo a buen ritmo y antes de darme cuenta estamos llegando a Paramo y me vengo arriba, adelanto en la subida empedrada a mi amigo Raúl con quién estaré te adelanto me adelantas durante toda la carrera.
Ángel González Rivero
Llega la subida a la Campona y bufff que pesada se hace pero voy suave y tranquilo que queda mucha carrera y me adelanta la gente pero pienso para mí: ya llegará la bajadina. Reposto en el avituallamiento de la Campona donde esta una gente cojonuda animando, mil gracias por ello y viene lo bonito la Bajada. Tomo aire y a fuego comienzo a bajar y lo disfruto a tope y adelanto a unos cuantos y llego a Primout donde me alimento y sigo bajando por la orilla del río con alguna caída disfrutona y en nada al Pico Negro donde se hace dura pero divertida la subida.
Y otra vez la bajada y otra vez a fuego y en nada bajadas de infarto por sendas estrechas y técnicas y otro avituallamiento y ya se ve el pueblo y se siente la megafonía. Pienso para mí : Esta va para mi sobri y pienso en ella y sin darme cuenta estoy en el asfalto y doy la reserva que me quedaba y llego al sprint a meta y a dar las gracias y saludar a Bosena, Vero y toda la gente que nos apoya .
Llegada a Meta
 Gran carrera y buena organización. Otra para el cinto.
Gracias al Club Cueto Del Oso y al  Club Atletismo León por el apoyo y los ánimos y a toda mi gente
Angel González Rivero

Dos hombres y un destino (Maratón de Barcelona)


Estaban sentados en una cafetería alrededor de unos tés rojos varios miembros del equipo, cuando sin saber porque la conversación llego a la palabra Maratón, tras haber propuestas de varios miembros del club para ir a Valencia, pasó la fecha, y la idea seguía en el aire, de repente en un alarde de valentía el gran Adriano dijo si alguien viene al de Barcelona voy, y quien sino iba a saltar, Sabugo, que se anima a todos los saraos, y la combinación no podía ser peor, en un momento se montó la gozadera. Sacaron el móvil y ambos se inscribieron en ese instante. Menos mal q bebían té y no Ginebra sino a saber dónde hubieran ido a correr.
 
Una vez inscritos ambos, los caminos a seguir eran dispares. Adriano se enfrentaría a un reto personal, debutar en la distancia tras llevar algo más de un año en esto de las carreras. Por otro lado, Sabugo que estaba preparando la maratón de Sevilla como primer objetivo de la temporada, buscaría alargar ese entreno para repetir distancia en 3 semanas. La Huguiña estuvo a punto de unirse a la expedición pero finalmente se decantó por el de Sevilla.
 
Adriano y Sabugo
Pasados unos meses, se aproximaba la fecha y nuestros dos piezas emprenderían el viaje, llegando ambos en diferente estado de forma, Sabugo, en buena forma, tras el sabor agridulce del maratón de Sevilla que no se conformó con su marca a pesar de que hiciese marca personal, como dice él, es un edarling, es un runner exigente.
 
Adriano llegaba en buena forma y con mucho ánimo, quizás un poco falto de kms, por la falta de tiempo libre para entrenar, el trabajo y su futura paternidad  le llevaron  a entrenar a horas intempestivas bajo el duro e incómodo frío leones.

Viaje a Valladolid, avión a Barcelona, días previos muy tranquilos, recogida de dorsal,  clásico paseo por la feria del corredor, alimentación  a base de pasta.
 
Adriano, Sabugo y Dani
A la expedición se unió ya en Barcelona un nuevo miembro del equipo, Dani, primo de Adriano, natural de Barcelona y que haría de anfitrión el fin de semana.
 
El domingo a las 6 sonó el despertador, y todo empezó, el desayuno, el metro, calentar, mear, vaselina, volver a mear, vaselina, mear, mear, y al cajón de salida.

Sabugo sale en el cajón de sub 3 horas, con sensaciones encontradas, con dudas en la estrategia de carrera, consciente de que no estaba en el momento bueno de hacer marca pero con ganas de hacer un buen maratón.
 
Por otro lado Adriano y Dani en el cajón de 3:30 buscarían, por un lado, Adriano cumplir el objetivo de llegar a meta, de disfrutar y de vivir la esencia de la primera vez, desvirgarse maratonianamente hablando. En cambio, Dani tenía idea de acompañar a Adriano y si pudiese ser bajar de 3:30 buscando marca personal en su segundo participación en la distancia.
 

Da la salida (escalonada cada 3 min por cajones) la señora alcaldesa Ada Colau, me abstengo de comentarios, y las más de 20.000 personas presentes  comienzan a moverse.
Por delante Sabugo intenta no calentarse en la rápida salida, buscando ser conservador dentro de sus capacidades e intenta no ir más rápido de 4:10 ni más lento de 4:20,
Mientras que bastantes miles de personas más atrás Adriano y Dani intentan entre la multitud coger un poco de ritmo y pronto se ponen a ritmos cómodos buscando entrar en calor y que vayan cayendo los primeros kms.
 
Tras bordear el Camp Nou y volver hacia la plaza de España, caen los primeros 10 km y nuestros corredores  van sobre lo previsto. Debido a la multitud de corredores los grupos no llegan a estirarse y  los tres van acomodados en grandes grupos, que por un lado ayudan a llevar un ritmo constante pero también demandan una gran atención.
 
En el avituallamiento del km 17.5 Sabugo mientras bebe se despista y acaba parando en seco contra dos contenedores para las botellas vacías, suerte que estos eran de cartón y el impacto no fue fuerte, pero el susto fue el suficiente como para acabar por el suelo, por suerte sin ningún rasguño. Quizás un poco de "mierda pierdo el ritmo" y un mucho de vergüenza hizo que se levantara casi antes de haber tocado el suelo. Rápidamente se repone y vuelve a coger el ritmo de carrera.


Los kms siguen para todos, Sabugo pasa por la media en 1:29 y Adriano y Dani enfocan la larga recta de la calle meridiana que les llevará  hasta el arco de media maratón para luego volver por la misma calle en sentido contrario.  De repente nuestros corredores se cruzan en dicha calle y Adriano ve a Sabugo al que alienta animosamente, Sabugo que ya marcha por el km 22 manteniendo un ritmo medio de 4:15, de repente se para dar media vuelta y se fue en sentido contrario, deshace un par de kms, para encontrarse con Adriano y Dani los que se sorprenden al verlo. Al preguntar a Sabugo que hacía allí dijo que este maratón había ido a disfrutar y que mejor manera de hacerlo que con un buen compañero como Adriano.

Ruedan varios kms al ritmo medio que Dani y Adriano traen, las sensaciones en general para los 3 son buenas y los kms pasan, entre zancada y zancada entre sorbo y sorbo de agua, se plantan en el km 30, intentan bajar un poquito el ritmo buscando ser un poquito conservadores, para afrontar con ciertas garantías lo que queda.
 
Adriano empieza a flaquear, seguramente por la falta de entreno, y en el km 32 empieza a percatarse que los 10 km que quedan serán duros. Con algún que otro malestar llegan al km 34 encarando la rambla del Arco del triunfo donde tras una pequeña conversación Dani decide aprovechar sus buenas sensaciones e intenta buscar su marca personal mientras Sabugo y Adriano deciden tomarlo con más paciencia buscando la garantía de llegar.
 
Aparece el muro, muro muy alto, el hombre del mazo golpeando con fuerza, cada km parece eterno, aparecen los típicos calambres, entre trote y trote parada técnica para estirar. Ruedan a velocidad anormalmente reducida un par de kms agarrándose el uno al otro para animarse  y motivarse, y ambos reciben los mayores ánimos tanto del público como del resto de participantes, sufriendo casi un linchamiento público al recibir constantes palmadas de ánimo en la espalda acompañadas de frases como, "lo tenéis hecho" "animo leones" "come on gays" "go go go" "anims nois".
 
Los últimos kms fueron duros pero la esencia de un compañero que te anima y te acompaña dio su fruto, ambos llegan juntos a meta y ambos logran el objetivo que se plantearon, Adriano logra completar su primer maratón y Sabugo disfrutar de su decimocuarto maratón presenciando en primera persona el debut de un compañero.
Sin olvidarnos de Dani que consigue hacer marca personal tras bajar de 3:30.
 
Las lecturas de ambos fueron diversas, las palabras de Adriano fueron: "esto fue más duro de lo que esperaba, pero, repetiré, me quitare esta espinita y mejorare mi marca" mientras que Sabugo dice  "acompañar a otro corredor y olvidarme del tiempo han hecho que disfrute de correr como hace tiempo y recuerde porque corro maratones"

El maratón de Barcelona sin duda puede ser el mejor para debutar en la distancia, no había un solo cm de recorrido en el que no hubiera público y gente animando, si quieres desvirgarte en la distancia Barcelona es ideal. Esperamos desde el club que antes de acabar el año narremos más maratones, y más logros personales de nuestros corredores.
  
 
Jorge Sabugo Sousa