FELICIDIDAD: Estado de ánimo de
la persona que se siente plenamente satisfecha por gozar de lo que desea o por
disfrutar de algo bueno.
Quería empezar esta crónica con esta descripción,
porque refleja en resumen como me siento. Todo comenzaba así…el domingo 12 de
Julio se realizó la edición 2015 del
Kilometro vertical del “Catoute” con salida en el precioso pueblo de Colinas
del Campo de Martín Moro Toledano (al que recomiendo a todo el mundo visitar) y
llegada en el “Pico Catoute“ (2117 mtrs.) con 1000 metros positivos acumulados
en una distancia de 6 km de carrera.
David Redondo y Salazar |
La ilusión y las ganas de “hacerlo bien” venían pidiendo paso
desde hace ya unos meses en mi cuerpo y mi cabeza. Poco a poco y tras haber
hecho unos entrenamientos eficaces y competir de menos a más, en las carreras
de: “Trail Balboa”, “Alto Sil”, “Tebaida Berciana”, “Ruta de la Mencía” e
“Infinity Trail”, consiguiendo resultados cada vez mejores, llegó el día del
Catoute. Sobre las 8 y 30 de la mañana quedamos los 4 compañeros del Club Atletismo
León que íbamos a realizar la prueba: Rivero, Salazar, Fran y yo. El ambiente se empezaba a vivir entre nervios,
comentarios y risas; encuentros con conocidos de otras carreras e intercambio
de conversaciones. El día era soleado y el termómetro no paraba de subir, sabía
que iba a ser duro..pero yo voy bien con el calor.
David Redondo |
A las 10:44 tomaba salida, y desde ese momento y hasta
coronar el pico, sabía que lo estaba haciendo bien, porque las piernas y la
cabeza funcionaban como si fueran una. En el circuito, me encontré con personas
encantadoras, como la mujer de un gran corredor: Isidro Vázquez (primer
veterano), dándonos agua altruistamente a cada uno de los participantes, eso
fue en el Km 3,5, y a partir de ahí
comenzaba lo duro, el ascenso hasta lo más alto donde nos esperaba un numeroso
publico que con sus voces y gritos hicieron que fuera más fácil llegar a meta.
David Redondo |
El crono se paró en 52:40, yo ya sabía que era un tiempo muy
bueno, pero tenía que esperar a que los “grandes” que venían por detrás
coronaran y comparar tiempos. Finalmente tercer puesto, no cabía de alegría,
estaba emocionado, el nivel era alto y era mi primer kilómetro vertical;
sinceramente el día más feliz desde que empecé en el Atletismo.
A la hora de subir al pódium volvieron los nervios, estaba
como “un niño con un juguete nuevo”, pero encantado, veía a la gente conocida y
cercana y más orgulloso estaba.
Podio del Catoute |
Finalmente terminar esta crónica dando las gracias a todo mi
club “Atletismo de León”, por el apoyo, la paciencia, la aprendido, el
compañerismo…y un sinfín de etc..que no terminaría nunca, porque gracias a esta
familia estoy más ilusionado que nunca. Toca pensar ya en el siguiente reto:
DESAFÍO SOMIEDO…con muchas ganas¡¡¡¡¡
David Redondo
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